Las ocho estrategias que utilizamos para ser felices (y cuáles realmente funcionan)
El confidencial 11/09/2013
Aunque la búsqueda de la felicidad ha sido una de las principales preocupaciones de la humanidad, los intentos por explicar en qué consiste y cómo podemos alcanzarla han partido siempre de la filosofía y la religión. La ciencia siempre se ha mantenido alejada de un campo de conocimiento que consideraba fuera de su negociado, pero cada vez son más los estudios sociales y biológicos - en particular desde el auge de la psicología positiva - que tratan de explicar qué hace verdaderamente feliz al ser humano, y qué estrategias puede desarrollar para perseguir ésta.
En la actualidad, muchos psicólogos creen que nuestro bienestar se puede cuantificar, pues la felicidad puede entenderse fácilmente como un estado de ánimo opuesto a la depresión. Así, las personas más felices son las que cumplen con menos requisitos para desarrollar este trastorno. En una escala del 1 al 10, la depresión crónica ocuparía la primera posición, la felicidad crónica, la última. Hay, por tanto, distintos niveles de felicidad y, como en cualquier escala, tenemos la posibilidad de subir o bajar peldaños.
En 2006, los psicólogos Chris Tkach y Sonja Lyubomirsky, profesores de la Universidad de California en Riverside publicaron un rompedor estudio en la revista Journal of Happiness Studies en el que trataron de identificar las estrategias que usamos para alcanzar la felicidad. Según los investigadores, aunque les demos distintos nombres, todos realizamos actividades similares de cara a aumentar nuestro bienestar, pero no todas tienen la misma eficacia.
La felicidad y los perfiles afectivos